Los laboratorios de microbiología alimentaria han quedado relativamente rezagados en el proceso de automatización en relación con otro tipo de laboratorios.
Durante las últimas décadas, los laboratorios de microbiología clínica han aumentado significativamente sus niveles de automatización, adoptando sistemas automatizados o semiautomatizados en gran parte de sus flujos de trabajo, generando valor añadido y mejorando el nivel y rapidez de los diagnósticos.
Es cierto que aún existen numerosos retos en este campo y tipología de laboratorios, pero el cambio de paradigma empezó hace muchos años y ya son visibles gran parte de los resultados esperados.
El reto de los laboratorios de microbiología alimentaria
A diferencia de los laboratorios de microbiología clínica, donde la adopción de sistemas automatizados es actualmente una realidad, los laboratorios de microbiología industrial han quedado relativamente rezagados en este proceso.
Uno de los casos más llamativos es el de los laboratorios de microbiología alimentaria.
Procesos manuales y tareas repetitivas de poco valor añadido
Este tipo de laboratorios, como ocurre en gran parte de los laboratorios de microbiología industrial y del mismo modo que ocurría hace décadas en los laboratorios clínicos, sigue realizando gran parte de sus procesos de manera manual y repetitiva, dedicando gran parte de recursos a tareas de poco valor añadido. Desde los procesos iniciales de preparación de medios y muestras, la inoculación y dilución de estas, el cultivo, la incubación, el conteo y la detección e identificación de patógenos, los flujos de trabajo son aún tediosos y poco optimizados.
A esta situación cabe añadir dos factores no menores. El primero es la carencia de personal cualificado, aspecto que incrementa con el paso del tiempo. En segundo lugar, la creciente exigencia del propio mercado, que obliga a mayores niveles de control y rapidez en los resultados. Según la Organización Mundial de la salud, 1 de cada 10 personas en el mundo, enferma por la ingesta de alimentos contaminados.
Automatización de laboratorios: una reacción necesaria para avanzar
Debido a estos aspectos, los laboratorios de microbiología alimentaria se encuentran actualmente en la tesitura de evolucionar y reconvertirse en laboratorios de futuro.
Tal y como detallamos en el artículo «La nueva utilidad en automatización de laboratorios» es preciso que, durante este proceso de transformación, los responsables de estos laboratorios valoren sistemas que no sólo automaticen, sino que generen valor a través de la automatización.
Con el objetivo de ofrecer el mejor servicio a los consumidores finales, las soluciones a implementar en el laboratorio requieren de un nuevo enfoque; más holístico (abarcando todo el flujo de trabajo), modular (diseñando soluciones modulares adaptables a cada tipología y tamaño de laboratorio), escalables (capaces de cubrir desde la muestra hasta la decisión), fiables (enfocadas a mejorar la fiabilidad y trazabilidad de los controles) y optimizadas.
Mediante este enfoque, las ventajas de la automatización, el valor generado., será visibles tanto para los responsables de los laboratorios como para los usuarios.
El laboratorio de microbiología de alimentos del futuro está próximo y es, sin duda, uno de los grandes retos en el mundo de la automatización de laboratorios de microbiología. Contacta con nosotros para saber más >